De aparentar un corazón de roca y una vestidura de hierro, de pronto me sentí al descubierto. Había sido también un humano de carne y hueso, cuyo corazón palpita de manera inexorable al vulnerable son del amor...
De aparentar un corazón de roca y una vestidura de hierro, de pronto me sentí al descubierto. Había sido también un humano de carne y hueso, cuyo corazón palpita de manera inexorable al vulnerable son del amor...
Lo cierto es que para llegar a Huacaybamba, uno tiene que surcar por una carretera que serpentea entre las montañas andinas de Lima, Ancash, y luego para adentrarse en la región Huánuco. ..
Yo era un pipiolo, un aprendiz en todo campo, incluido en las lides del amor. Mi locura me estaba llevando por caminos que no conocía. Las salidas con Brigitte se volvieron más frecuentes. Pronto conocí a sus padres, a quienes les caí bien y mal. Bien, porque estudiaba Derecho, y mal, porque yo prevenía de una familia de clase baja, principalmente por mi estatura y también por mis ingresos económicos.
A mí siempre me han dicho que si uno quiere hablar en francés, debe hacerlo sin errores, ya que los franceses no toleran que uno lo aprenda a medías. ¡Tranquilo chico, estás viajando conmigo!, me dice Yuli y me hace un guiño. Efectivamente, el segundo idioma de mi acompañante es el francés, por lo que voy más calmado...
“Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé, en el quinientos seis y en el dos mil también; que siempre ha habido chorros, maquiavelos y estafáos, contentos y amargaos, valores y dublé. Pero que el siglo veinte es un despliegue de maldad insolente ya no hay quién lo niegue, vivimos revolcaos en un merengue y en un mismo lodo todos manoseaos...”
Huánuco ya no es la misma ciudad de antaño, ahora si te expones al sol te puedes cashpar rápidamente, el viento de la tarde intempestivamente te despoja del lapichuco, y el frío de la noche provoca un “alalau carajo”. Así como el clima, también las personas han cambiado, ya que de nobles y leales caballeros ya pocos quedan, ahora abundan haraganes, opas, hueplas y tacras...